Fecha de publicación: 3 de Junio de 2025 a las 16:06:00 hs
Medio: INFOBAE
Categoría: GENERAL
Descripción: En plena mudanza y con otro bebé en camino, la conductora compartió su solución casera para mantener a India a salvo
Contenido: Hace poco tiempo, la vida de la China Ansa cambió para siempre. Y no solo por su embarazo, sino porque su hija India, de apenas un año y once meses, demostró que no piensa quedarse quieta ni un segundo. En medio del crecimiento de su familia y de una gestación que transita con alegría, la conductora compartió con sus seguidores un episodio doméstico que refleja con ternura, y también algo de ingenio, la dinámica de su hogar.
“Cosas que pasan cuando tenés una hija como la mía, que a los ocho meses se tiró de la cuna. Desde ese entonces duerme en un colchón en el piso”, escribió en una historia de Instagram, junto a una imagen que muestra la improvisada pero efectiva barrera de seguridad con la que busca evitar riesgos mientras esperan que lleguen las puertas de protección para la escalera. “Mientras tanto...Sí, hija, tu papi es un poco exagerado”, fueron las palabras que eligió plasmar en la foto, donde también se ven flechas rojas que marcan la estructura de madera de la cuna colocada de forma estratégica, junto a una silla que cumple el rol de contención improvisada.
El relato doméstico, contado con humor, se da en medio de un momento pleno para la periodista, que espera su segundo hijo junto al exfutbolista Diego Mendoza. La llegada del nuevo integrante de la familia está prevista para octubre, y la China transita el cuarto mes de gestación. En mayo, reveló que el bebé se llamará Rafael, en una publicación íntima y reflexiva en la que confesó que, hasta entonces, siempre había imaginado otro panorama como madre.
“Siempre creí que iba a ser mamá de dos nenas”, comenzó escribiendo en un posteo que conmovió a sus seguidores. En ese texto, la periodista repasó cómo, incluso antes del nacimiento de India, junto a Diego ya habían elegido nombres, proyectado escenas, imaginado ropas y juegos compartidos entre hermanas. Pero este embarazo llegó con otra intuición. “Quedé embarazada y ya sentía que se venía el varoncito, así que cambiamos de planes y en cuanto vimos el test positivo, lo llamamos Rafael”, reveló.
La noticia del embarazo no fue comunicada con producciones planificadas ni posteos preparados. Surgió en vivo, durante una transmisión televisiva, mientras rememoraba un verano en Mar del Plata. En medio del relato, el recuerdo se hizo cuerpo: se llevó la mano a la panza y dijo, sin red ni guión, que estaba embarazada. “Como se cuentan las cosas que realmente importan”, dijo luego.
Días más tarde, la pareja compartió un video casero que funcionó como revelación de sexo. Con las remeras blancas como lienzo y las manos cubiertas de pintura, India fue protagonista de un juego familiar. La secuencia, inicialmente en blanco y negro, recuperó el color hacia el final: las palmas celestes de los tres confirmaban que se trataba de un varón.
India, desde su nacimiento, fue el centro de una transformación total en la vida de Ansa y Mendoza. “Le cambió la vida de forma radical a Diego”, contó ella en más de una ocasión. Y el deseo de agrandar la familia no fue improvisado. “Queremos tener dos o tres hijos”, había dicho la conductora en una entrevista televisiva meses atrás.
Hoy, esa proyección se materializa en pequeños gestos cotidianos: una cuna desarmada transformada en baranda, una hija dormida en el piso por decisión familiar, un nuevo nombre que empieza a sonar en casa. Mientras se prepara para recibir a Rafael, Ansa muestra una maternidad despojada de filtros, donde la ternura convive con el caos y el humor es la mejor herramienta para sostener la intensidad de los días.
Visitas: 0