Menú Responsive Foundation

Fecha de publicación: 17 de Noviembre de 2025 a las 08:47:00 hs

COMPARTIR NOTICIA

WhatsApp Facebook

Medio: TN

Categoría: GENERAL

Cruzar las piernas puede ser cómodo, pero no siempre es bueno para la espalda

Portada

Descripción: Sentarse con las piernas cruzadas puede parecer una postura natural, pero no es recomendable para todas las personas. Especialistas en ortopedia explican cuándo puede ser beneficioso.

Contenido: Cruzar las piernas es una forma común de sentarse, ya sea en un picnic, jugando en el piso o durante una reunión al aire libre. Aunque puede sentirse relajado y natural, no está libre de riesgos, especialmente para quienes tienen problemas en la columna.

Leé también: Si pasaste los 40, tené cuidado con las manos: uno de cada cuatro se fractura la muñeca

Según el ortopedista alemán Martin Rinio, esta postura “puede ser beneficiosa si se realiza ocasionalmente, ya que estira músculos y ligamentos de la cadera”, pero advierte que no debería mantenerse durante períodos prolongados.

Rinio explica que la rotación externa de la cadera al cruzar las piernas ayuda a:

“Los músculos de las caderas y los muslos se estiran y eso puede mejorar la movilidad”, señala el especialista.

Por eso, realizarla ocasionalmente y sin forzar es una forma saludable de mantener flexibilidad.

El problema surge cuando la postura se sostiene durante demasiado tiempo. Según Rinio, “la mayoría de las personas tiende a dejar caer los hombros hacia adelante al estar así, lo que sobrecarga la columna vertebral”.

Para quienes tienen condiciones previas, puede ser aún más riesgoso.

El especialista destaca que esta postura debe evitarse en personas con espondilolistesis, una condición donde una vértebra se desplaza de su posición habitual y puede causar dolor, adormecimiento u hormigueo.

“Si hay dolor o molestia, lo recomendable es cambiar de postura inmediatamente”, aclara.

En lugar de evitar completamente esta posición, el consejo es variar.

Rinio recomienda:

“Es bueno alternar entre estar erguido, inclinarse hacia adelante y hacia atrás, y cambiar frecuentemente el peso corporal”, señala.

La conocida postura del loto, utilizada en yoga y meditación, exige más flexibilidad que la posición clásica con las piernas cruzadas.

A diferencia de la postura común, el loto puede ser más estable para la espalda porque “la pelvis se inclina hacia adelante, lo que ayuda a que la columna se mantenga derecha”, explica Rinio.

Pero no es adecuada para todas las personas:

Quienes quieran utilizarla durante prácticas prolongadas deberían trabajar movilidad y flexibilidad de caderas.

Un movimiento simple sugerido por fisioterapeutas es la postura de la mariposa:

Este ejercicio ayuda a suavizar la apertura de cadera y preparar articulaciones y tejidos.

Imágenes adicionales
Imagen relacionada 1

Leer más

Visitas: 0