Fecha de publicación: 15 de Octubre de 2025 a las 10:00:00 hs
Medio: INFOBAE
Categoría: GENERAL
Descripción: Las autoridades estadounidenses informaron que la operación Pacific Viper permitió interceptar 34 embarcaciones en alta mar y confiscar miles de kilos de estupefacientes entre agosto y octubre
Contenido: La Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) anunció la incautación de más de 45.000 kilogramos (100.000 libras) de cocaína en el Océano Pacífico oriental desde el inicio de la Operación Pacific Viper en agosto, marcando uno de los operativos antidrogas más grandes recientes en la región. Las autoridades informaron que la serie de decomisos se extiende desde principio de agosto hasta mediados de octubre y afecta principalmente a organizaciones criminales dedicadas al tráfico transnacional de estupefacientes.
De acuerdo con un comunicado difundido por la USCG y reportes de medios como ABC News, la operación llevó a la captura de 86 personas sospechosas de actividades narco-trasnacionales. Los operativos incluyeron la participación de diversas agencias estadounidenses, la coordinación internacional y el uso de medios navales y aéreos, confirmaron fuentes oficiales.
La región del Pacífico Oriental se ha consolidado en los últimos años como uno de los principales corredores marítimos utilizados para el tráfico de drogas sintéticas y cocaína desde Centroamérica y Sudamérica hacia Estados Unidos, según datos del Gobierno estadounidense y análisis publicados por agencias internacionales. El reforzamiento de la vigilancia marítima responde a la presión ejercida por el incremento del flujo de estupefacientes hacia el mercado norteamericano.
Durante el desarrollo de la Operación Pacific Viper, la Guardia Costera de Estados Unidos decomisó más de 45.000 kilogramos (100.000 libras) de cocaína entre agosto y mediados de octubre de 2025, según datos oficiales y reportes de ABC News. Las incautaciones se produjeron durante 34 acciones de interdicción ejecutadas en aguas internacionales del Pacífico oriental, zona considerada estratégica para el tráfico de estupefacientes procedentes de América Latina.
La cifra total representa uno de los mayores decomisos recientes en la lucha contra el tráfico marítimo de drogas hacia Estados Unidos. De acuerdo con el vicealmirante Jeffrey Novak, subcomandante del área del Pacífico de la USCG, el promedio diario de sustancias prohibidas incautadas superó los 725 kilos, lo que da cuenta del volumen de narcóticos transportados por estas rutas.
La Operación Pacific Viper se diseñó para reforzar la seguridad y vigilancia en el Pacífico oriental, tradicional corredor de tráfico de cocaína desde Colombia, Perú y Ecuador hacia las costas estadounidenses. Según el comunicado institucional de la USCG, la operación integró recursos terrestres, navales y aéreos, con la participación de 220 embarcaciones, 185 aeronaves y cerca de 1.300 lanchas rápidas.
La coordinación de la operación tuvo lugar bajo el mando del Distrito Suroeste de la Guardia Costera, en alianza con el Comando Sur de Estados Unidos y su Fuerza de Tarea Interagencial Conjunta-Sur (JIATF-South). Estas agencias se encargan de la detección de embarcaciones sospechosas, así como del seguimiento e intervención cuando los indicios de tráfico son confirmados.
En total, 86 personas vinculadas presuntamente con el tráfico internacional de drogas resultaron detenidas durante las 34 interdicciones ejecutadas en el marco de la Operación Pacific Viper, de acuerdo con el reporte oficial difundido por la USCG y la cobertura de ABC News. Las detenciones se llevaron a cabo tras la interceptación de embarcaciones con grandes cargamentos de cocaína, en alta mar y en coordinación con autoridades internacionales.
El Pacífico oriental conecta las costas de Sudamérica con Centroamérica y Estados Unidos, y ha sido identificado por el Gobierno estadounidense como la ruta marítima más utilizada para el tráfico de cocaína a gran escala. Los cárteles y organizaciones criminales emplean lanchas rápidas y buques pesqueros adaptados para transportar cargas voluminosas de narcóticos, buscando evadir los controles de las fuerzas de seguridad, según datos oficiales de la USCG.
El incremento del flujo de drogas por esta vía ha motivado el despliegue de más recursos y tecnologías de detección, con el objetivo de limitar la capacidad operativa de las redes criminales que dominan el corredor marítimo.
La Operación Pacific Viper implicó el trabajo conjunto de la Guardia Costera de Estados Unidos, el Comando Sur y la Fuerza de Tarea Interagencial Conjunta-Sur, con la colaboración de agencias internacionales. Globalmente, los despliegues incluyeron patrullaje de embarcaciones de alta velocidad, aeronaves de vigilancia y el uso de inteligencia marítima.
La USCG dispone de más de 76.000 efectivos y jurisdicción sobre cerca de 7,2 millones de kilómetros cuadrados de zona económica exclusiva, con activos que permiten responder de forma rápida y adaptar la estrategia ante cambios en las tácticas criminales. El operativo contó con el apoyo de aliados extranjeros, reforzando así la cobertura regional ante la magnitud del tráfico de drogas.
El vicealmirante Jeffrey Novak subrayó la importancia del resultado obtenido. “Cuando decimos que la Guardia Costera está acelerando las operaciones antinarcóticos, nos referimos a esto. Nuestro equipo marítimo vigila sin descanso las rutas de contrabando en el Pacífico Oriental, neutralizando las redes narco-terroristas”, expresó Novak de acuerdo con ABC News.
En el comunicado oficial, la agencia añadió que la operación Pacific Viper continuará para “proteger el territorio estadounidense, contrarrestar el terrorismo y desmantelar las organizaciones criminales transnacionales y los cárteles responsables del tráfico de drogas”.
Las más de 45 toneladas de cocaína incautadas y la detención de 86 personas evidencian la escala de las operaciones de los cárteles que usan las aguas internacionales como vía principal hacia el mercado estadounidense. La magnitud del decomiso refuerza el papel de la Guardia Costera de Estados Unidos como agencia líder en interdicción marítima y apunta a un endurecimiento de las estrategias de control regional.
Fuentes institucionales indicaron que los esfuerzos para interceptar cargamentos ilícitos y capturar tripulaciones vinculadas al tráfico continuarán durante los próximos meses, reforzando la cooperación internacional y la asignación de mayores recursos.
Visitas: 0