Menú Responsive Foundation

Fecha de publicación: 4 de Octubre de 2025 a las 09:14:00 hs

COMPARTIR NOTICIA

WhatsApp Facebook

Medio: TN

Categoría: GENERAL

El viaje en tren más largo del mundo: une Europa y Asia en 21 días y recorre más de 18 mil kilómetros

Portada

Descripción: París, Moscú, Pekín y Bangkok son algunas de las paradas icónicas de este itinerario que cruza 13 países y ofrece una experiencia única: atravesar dos continentes sobre rieles.

Contenido: Viajar en tren no siempre se trata de llegar rápido, sino de disfrutar el trayecto. Y pocas experiencias lo representan mejor que el recorrido ferroviario más largo del mundo: una travesía de 18.755 kilómetros en 21 días, desde Lagos (Portugal) hasta Singapur.

Este itinerario, que combina distintos trenes y requiere conexiones y boletos separados, atraviesa 13 países, desde las costas atlánticas de Europa hasta el corazón del sudeste asiático.

La ruta comienza en el Algarve portugués, con destino final en la isla-estado de Singapur. En su recorrido, el tren cruza España, Francia, Alemania, Polonia y Bielorrusia, hasta llegar a Moscú, punto clave donde Europa se une con Asia.

Desde allí, el viaje se interna en las inmensidades siberianas, avanza hacia Mongolia y finalmente entra en China, con parada en Pekín. Más adelante, el itinerario continúa hacia el sudeste asiático atravesando Laos, Tailandia y Malasia, antes de culminar en la cosmopolita Singapur.

Lo fascinante de esta travesía es que el destino final deja de ser lo más importante: el verdadero atractivo está en las horas frente a la ventana, viendo cómo se suceden paisajes, culturas e idiomas a lo largo de miles de kilómetros.

Leé también: Vacaciones: el nuevo destino paradisíaco que eligen los argentinos y que compite con Brasil

Entre las ciudades más destacadas del trayecto se encuentran:

Cada parada ofrece una postal distinta del mundo, desde los rincones inhóspitos de Siberia hasta las capitales más influyentes de Europa y Asia.

El precio total de los pasajes ronda los 1.200 euros, sin incluir comidas ni alojamiento en las paradas intermedias. Aun así, resulta una forma relativamente accesible de unir dos continentes sin necesidad de volar.

Además, el recorrido tiene un valor agregado: es una de las formas de viajar más sustentables. Hacer este trayecto en tren emite hasta 10 veces menos carbono que hacerlo en avión, lo que lo convierte en una alternativa épica para quienes buscan explorar el mundo a otro ritmo, sin prisa y con conciencia ecológica.

Imágenes adicionales
Imagen relacionada 1 Imagen relacionada 2 Imagen relacionada 3

Leer más

Visitas: 0