Menú Responsive Foundation

Fecha de publicación: 31 de Julio de 2025 a las 05:55:00 hs

COMPARTIR NOTICIA

WhatsApp Facebook

Medio: TN

Categoría: ECONOMIA

Pese a las medidas del Gobierno para contener el dólar, los analistas advierten que la volatilidad continuará hasta las elecciones

Portada

Descripción: A pesar de la suba de tasas, el tipo de cambio marcó récords ayer. Cómo puede seguir la cotización, según los especialistas.

Contenido: El dólar no reacciona a la artillería del Gobierno. Pese a la intervención en futuros, la suba de tasas y las declaraciones del equipo económico, la presión alcista sobre el tipo de cambio continúa.

Este miércoles, la cotización llegó a máximos históricos. En el segmento mayorista, el dólar avanzó $24 y cerró a $1315. Por su parte, en las pantallas de Banco Nación el billete estadounidense se vendió a $1325, lo que significó un alza diaria de $25.

Leé también: Tras la suba de tasas, el dólar llegó a un máximo de $1325 y cayeron las acciones argentinas en Nueva York

Aunque los precios se mantienen dentro de las bandas establecidas por el Gobierno, que al día de hoy están entre $965,29 y $1449,83, la suba va en contra de los anticipos que había hecho el equipo económico sobre la inminente llegada de la cotización a la banda inferior.

Al mismo tiempo, las compras de dólares “en bloque” que está haciendo el ministerio de Economía fueron a valores superiores al centro de las bandas (actualmente en $1207,56). Esas operaciones, aunque necesarias para acumular reservas, tienen otro efecto: funcionan como un mínimo de hecho para la cotización.

“Según nuestros cálculos, el Tesoro habría adquirido US$968 millones entre junio y julio a un tipo de cambio promedio (estimado) de $1251, lo que, de facto, impone un piso inferior al esquema de bandas", sostuvieron los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI).

La tendencia alcista no se calmó ni con la intervención oficial en dólar futuro, ni con la participación del Banco Central en la rueda Repo tomando pesos, ni con la suba de tasas de corto plazo que convalidó el Tesoro en la licitación de este martes.

Para Gonzalo Lacunza, economista de Empiria, más allá de la suba puntual de este miércoles hay que tratar de ver hacia dónde va la tendencia. “Hoy, marca que el mercado se sentiría más cómodo con un tipo de cambio algo por encima de este nivel y con tasas reales menores a las actuales. No creo que mucho, pero parece que los esfuerzos del Gobierno por tratar de mantenerlo por debajo de $1300 pueden no ser tan útiles”, sostuvo.

Leé también: Las ventas online crecieron 40% en el primer semestre del año impulsadas por indumentaria y decoración

Con respecto a los motivos, Lacunza no cree que la escalada esté asociada con un atraso del tipo de cambio, sino con expectativas desancladas. “Hay cierta incertidumbre sobre dónde lograrán estacionarse las tasas y el dólar. O hasta qué nivel de tasa real está dispuesto a convalidar Economía para mantener la estabilidad cambiaria. Tampoco se sabe cómo funcionan las intervenciones oficiales”, apuntó.

A su turno, Gonzalo Carrera, economista de Equilibra, agregó algunos factores que explican esta dinámica cambiaria. “En julio, sobre todo en la segunda quincena, hubo una caída de la oferta de dólares por parte parte del agro. Ese ingreso se concentró antes, por la baja temporal de las retenciones”, afirmó.

“Creo que ese es un factor relevante, sumado a algunas cuestiones de demanda que generan una presión adicional. En julio siempre hay más turismo al exterior, por ejemplo. A eso se le suma una mayor cercanía con las elecciones y el desarme de las Letras fiscales de Liquidez (Lefi), con el ruido que vino por el lado monetario”, completó.

Melisa Sala, economista jefe de LCG, coincidió: “Veníamos diciendo que en la medida que la oferta de dólares se moderara por efectos estacionales (o por la reversión de la baja de retenciones, que finalmente no se dio), la demanda, que venía siendo pujante, iba a hacer que el dólar testeara la parte media-alta de la banda”.

Para los analistas, el desarme de las Lefi generó un nuevo panorama monetario que todavía está acomodándose.

“Hay que acostumbrarse a un equilibrio entre el dólar y la tasa de interés más alto que el que teníamos antes. Más cerca de las elecciones, se busca un equilibrio con el que el mercado esté más cómodo: con el dólar en trono a $1300 y la tasa de interés real sea positiva y supere tanto a la inflación como a la expectativa de devaluación”, sostuvo Carrera.

Leé también: El dólar subió 7% en lo que va de julio, pero los analistas creen que no se trasladará a los precios

En la misma línea se manifestó Lacunza: “El fin de las Lefi fue algo desordenado y creo que al sistema le está costando la transición y administrar la liquidez eficientemente. Probablemente sea deseable la presencia del Banco Central para liderar y contribuir a reducir la volatilidad de las tasas más cortas hasta que el mercado se acomode”.

Y añadió: “De todos modos, los fundamentos macro siguen siendo relativamente buenos y gran parte del ruido se solucionaría con un tipo de cambio algo por encima del nivel actual, sin un traslado a precios tan dañino”.

Los economistas acuerdan en que el Gobierno hará todo lo posible para llegar a las elecciones con la inflación bajo control y por eso anticipan que seguirá usando la tasa de interés y el resto de las herramientas que tiene disponible con ese fin. No solo buscará contener la suba del dólar sino calibrarla para que no haya un salto abrupto que impacte en los precios.

“El temor del Gobierno a un eventual traslado a inflación motiva intervenciones crecientes en los futuros del dólar y en el mercado de pesos, traccionando para subir las tasas. De ahí, el resurgimiento de los pasivos remunerados del BCRA (después de haberlos eliminado hace un año con el lanzamiento de las Lefi), que buscan captar la liquidez excedente”, cerró Sala.

Imágenes adicionales
Imagen relacionada 1 Imagen relacionada 2 Imagen relacionada 3 Imagen relacionada 4

Leer más

Visitas: 0